martes, 5 de enero de 2010

Recuerdo que la música nos había unido

Suena, suena de fondo la música y tu te acercas, podría sentirte aquí cerca toda la noche, toda la vida. Musicalmente tengo tu mano en mi cintura, por debajo de la remera. Como una nota grave de algún instrumento olvidado, suena tu voz invitandome a apagar la luz. Sí, apagala. No me importa la oscuridad, lo único que necesito es el sonido.
Se caen como notas sobre un pentagrama, las ropas. Se deslizan por la piel que vibra y que pide por que me toques como si fuese un extasiado contrabajo.
El compás que marca el ritmo, se hace cada vez más constante y rápido.
Y yo canto desde lo más profundo de mi garganta, con aquellos gemidos que tanto te derretían.
Que recuerdos aquellos, querido. Por lo menos aún me sirven para escribir.

3 comentarios:

  1. si te sirven para escribir así, mejor.
    este texto me gustó más que el depravado de Dibujito o algo así (? jajaja
    te amo ♥

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  2. Me ha encantado..
    Y es que en realidad, todo es música, no se puede vivir sin ella!
    :)

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  3. Son historias que se basan en la realidad.
    Aunque a veces no querramos admitirlo.
    O puede ser al revés.
    Son historias que inventamos soñando que
    alguna vez se hagan realidad.

    La intencion de mi blog no era que sea publico
    pero te digo al verdad, me sorprendió tu
    visita y comentario.
    Gracias!
    Nos leemos!

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